Málaga se ha convertido en un referente en España de la medicina estética pero yo por la calle veo gente feísima. Tal vez antes éramos todavía más feos. En la playa me quito las gafas y así quien me mire me verá borroso. Las costumbres cambian y ahora los hombres se hacen esos cortes de pelo que se hacen y se depilan por un lado y se ponen pelo por otro. En una reunión de amigos que hace tiempo que no ves de repente aparece uno que era calvo pero ya no. Qué pereza tener que peinarse por la mañana. El pelo está sobrevalorado. Y la belleza también: hay algunos guapos feísimos, poco atractivos, como de plástico ahora que estamos en la semana sin plástico. En los últimos cuatro años se ha duplicado el número de hombres que se somete a la cirugía estética. A lo mejor antes eran tres y ahora son seis. Lo que más buscan estos hombres es un tratamiento de ácido hialurónico para evitar el aspecto de cansancio en la cara. Tío, échate una siesta y verás qué bien te levantas. Eso sí, despeinado. Para una buena siesta lo ideal es ser calvo. Estos días se publica el patrimonio de nuestras señorías. Pablo Montesinos tiene 34 años y y 157000 euros en el banco. Pero ese pelazo necesita cuidado, y después está el miedo a perderlo. En el ayuntamiento el que tiene más pelo es Cassá. Llevar cola es peligroso en los ascensores. Parecía que se la iban a cortar antes de las elecciones y ahora parece que se la van a cortar después. Se ha reunido con Eduardo Zorrilla y ante tantas intrigas nos preguntamos si no nos estarán tomando el pelo. Cassá tiene cinco hijos, así que en su comunidad de vecinos a lo mejor constituyen mayoría absoluta.
Siguiendo con cuerpos de ensueño, el súper campeón del mundo de boxeo era un ucraniano de 1,98 metros y 109 kilos de músculos, un blanco perfecto para otro blanco que fue derrotado por un negro más perfecto todavía, con la misma altura que el ucraniano y todavía más músculos, parece salido de un cómic. Pero ha llegado un mexicano gordo que se apellida Ruiz y lo ha tumbado. Ruiz dice que en el colegio le decían gordito y ahora toma gordito. La perfección a lo mejor era eso. El boxeo está bien como entrenamiento, pero no mola que te partan la cara. Ni partirla. Después del combate a Ruiz se le veía el cansancio en la cara, pero anda que al otro. El boxeador negro quiere la revancha y Ruiz le ha dicho que previo pago de 50 millones de dólares. Por ese dinero me dejo hasta depilar. Lo malo de la cirugía estética es que te quitan el aspecto de cansancio, pero el cansancio sigue. Te quitan la envoltura, el plástico. Usamos más plástico que hace 40 años, parece mentira. ¿Por qué no hacemos caso de las enseñanzas sanas? Queremos un mundo sin bolsas bajo los ojos. Como dice el refrán, en 100 años... todos perfectitos.