Pablo y sus cuadernos

José Antonio Garriga Vela y yo 0 comentarios

29/06/2018

El 9 de mayo de 2003 presenté “La otra ciudad”, mi primera novela, en compañía del escritor José Antonio Garriga Vela. 15 años y 5 semanas después, el 13 de junio de 2018, presenté “La distancia”, mi última novela, en compañía del escritor y amigo José Antonio Garriga Vela.
El 9 de mayo de 2003 no lo conocía personalmente. Había leído de él “El vendedor de rosas“ (lo terminé el 7 de agosto de 2000), “Los que no están” (terminado el 13 de enero de 2002) y “Muntaner, 38” (terminado el 18 de octubre de 2002).
Alguna vez lo había visto por la calle, con pelo largo, y pensé ése es Garriga Vela, el escritor. En una ocasión, en enero de 2002, cuando leí “Los que no están”, lo vi salir de la librería Proteo y entré de inmediato. Dije quiero el libro que haya comprado ese hombre con coleta que acaba de salir y me dijeron es un escritor, Garriga Vela, y dije ya. No tenemos el libro que ha comprado porque era un libro que él había pedido, añadieron. Pues yo también quiero pedirlo. Se trataba de “El amante de mi madre”, de Urs Widmer (terminé de leerlo el 14 de febrero de 2002), novela que, como las escritas por Garriga Vela, me encantó.
Ahora somos amigos y he cenado en varias de sus casas. No es que tenga muchas casas, es que se muda mucho. Su historia con las casas. He viajado con él por tres continentes, hemos comentado libros y nos hemos reído. Es bueno reírse. Incluso aparezco en uno de sus libros, “El anorak de Picasso” (terminado el 12 de mayo de 2010). También leí “Pacífico” (terminé el 1 de octubre de 2008) y “El cuarto de las estrellas”, del que no apunté la fecha en que terminé de leerlo pero él si anotó la fecha bajo su firma cuando me lo dedicó, el 17 de febrero de 2014.
Antes de la presentación de “La distancia”, releí “Los que no están” (lo terminé el 12 de junio de 2018, el día anterior a la presentación. No recordaba nada, sólo que me había encantado. Me volvió a encantar. Hoy he vuelto a comenzar “El amante de mi madre”, imagino que lo terminaré en tres o cuatro días, pero quién sabe, alterno libros y es época de ir a la playa. Mis dos hijos pequeños aún son pequeños y quieren me bañe con ellos, así no se puede leer en la playa. En el agua se mojan los libros. Papel mojado. Además, me gusta bañarme con mis hijos. Todavía creen que nado rapidísimo. A veces yo también lo creo, entonces trago agua y creo que es el fin. Fin. José Antonio Garriga Vela y yo

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